Renault Scenic

Las mejoras pueden darse en pequeños o grandes pasos. Cuando se desarrollan un concepto y una tecnología existentes, el resultado es un producto mejorado pero familiar. Esto permite al fabricante conservar a sus clientes. Cuando se opta por un nuevo concepto y una nueva tecnología, el resultado ya no es un producto mejorado, sino mejor. Con el nuevo Scenic, Renault se dirige a la familia moderna que busca un transporte igualmente moderno.

Y por ello, ¡cada pieza ha sido repensada! Así, el Scenic no es un SUV o un monovolumen puro, sino un coche que combina lo mejor de muchas formas. De un SUV, el Scenic tiene el morro alto y robusto y el capó largo. Sin embargo, carece de la altura libre al suelo o el espacio entre los pasos de rueda de un SUV. El resto de la carrocería tiene las formas básicas de un utilitario, pero más grandes. Con ello, Renault no se suma deliberadamente a la interminable carrera por seguir ofreciendo un modelo más grande que el otro. Con 447 cm de largo, el Scenic es medianamente grande para un coche de este tipo.

Espacio

El Scenic sólo está disponible como coche eléctrico y, por tanto, se pueden aprovechar al máximo las ventajas que ofrece la tecnología. Sin embargo, no se ha optado por un capó corto para conseguir un habitáculo más amplio. De hecho, Renault defiende que las cosas se pueden hacer de otra manera. Según Renault, la distancia entre ejes y la posición de las ruedas con respecto a los pedales determinan el espacio interior. Por eso, las ruedas del Scenic están en las esquinas extremas. También muy diferente: el Scenic es menos alto que un SUV y no obliga a los pasajeros a sentarse erguidos para aprovechar esa altura. En su lugar, el conductor del Scenic se sienta ligeramente más bajo, como en un utilitario tradicional. Esto tiene la ventaja de que el Scenic es más bajo, lo que hace que el coche consuma menos y sea más silencioso.

A pesar de la construcción relativamente baja, el espacio para la cabeza y las piernas en la parte delantera es bueno. De hecho, el espacio en la parte trasera es tan bueno que el Scenic puede rivalizar con coches familiares de un tamaño superior. Los pasajeros traseros tienen un reposabrazos que también puede servir como portavasos o soporte para la tableta. Como toda la electrónica está reunida bajo el capó, el maletero también es amplio. Como consecuencia, no hay un segundo espacio de almacenamiento bajo el capó. Otra pena: el botón para desbloquear el portón trasero se encuentra muy bajo, por lo que supone un riesgo de ensuciarse las manos al pulsarlo.

Equipamiento

El generoso espacio interior también se debe al techo solar especial. El tradicional techo panorámico con raíles y parasol se ha sustituido por un panel electrónico que puede transparentarse u oscurecerse pulsando un botón. Tiene la ventaja de ocupar menos espacio (4 mm en lugar de los 3 cm habituales) y ser más ligero (3 kg en lugar de los 7 kg habituales). Sin embargo, durante la prueba de conducción se observó que es menos eficaz que una persiana a la antigua, ya que el sol puede seguir incidiendo en los ojos.

El salpicadero está dominado por dos pantallas que forman un todo. El sistema de infoentretenimiento (audio, comunicación y navegación) está basado en Android Mobile. Como el coche intercambia datos con Android, Google Maps puede planificar automáticamente paradas de carga si la carga de la batería no es suficiente para llegar al destino introducido (nota: esto sólo funciona con Google Maps, no con otras apps de navegación integradas, como Waze). Quienes no deseen utilizar Android de Google por motivos de privacidad u otros, pueden desactivarlo y utilizar su propio smartphone como cerebro del coche a través de Apple CarPlay o Android Auto.

El sistema de audio opcional de Harman Kardon suena normal, pero este fabricante ha demostrado ser capaz de más en otros coches. Aun así, Harman Kardon se ha percibido como una gran mejora respecto a Bose, con el que Renault se había asociado hasta ahora. Renault se ciñe a una cosa: manejar el sistema de audio con una palanca situada a la derecha, detrás del volante. Con eso, ahora hay tres (¡!) palancas a la derecha detrás del volante, lo que causa confusión en la práctica (por ejemplo, conectar los limpiaparabrisas en lugar de la marcha atrás). ¿No podrían desplazarse esos mandos de audio a la izquierda?

Es bueno saberlo: Renault cada vez consigue utilizar más materias primas recicladas y también que el coche sea más reciclable. Con el Scenic, el fabricante va un paso más allá, con un 24% de materias primas procedentes de materiales usados.

Coche eléctrico: la teoría

El Scenic ofrece dos opciones de propulsión eléctrica. La versión básica cuenta con una batería de 60 kWh de capacidad, un motor eléctrico de 125 kW y una potencia máxima de carga de 130 kW. La versión tope de gama tiene una batería de 87 kWh, entrega 160 kW de potencia del motor y carga hasta 150 kW.

Como toda la electrónica está reunida bajo el capó, la conexión de carga también está en la parte delantera del coche. Por tanto, el conductor se ve obligado a aparcar hacia delante. Desgraciadamente, eso significa un radio de giro mayor al aparcar y menos visibilidad al arrancar. Muy inteligente: la batería tiene una conexión especial para una manguera de incendios, que apaga cualquier incendio de la batería en 10 minutos.

Coche eléctrico: práctica

Para esta prueba, elegimos la versión con el motor más potente y la batería de mayor capacidad. En condiciones meteorológicas favorables y con un estilo de conducción moderado, esto supuso un consumo de 17,6 kWh cada 100 km y una autonomía real de 603 km (especificación de fábrica: 625 km). Este consumo es medio, mientras que la autonomía es muy amplia para un coche de este segmento.

Como el Scenic está pensado para ser un coche familiar, la respuesta del acelerador es menos viciosa que la de otros coches eléctricos. Sin embargo, el rendimiento del motor eléctrico de 220 CV / 300 Nm sigue siendo bueno. De hecho, comparado con coches de gasolina similares, el Scenic E-Tech es muy superior en términos de suavidad y prestaciones. La recuperación de energía se puede hacer en cuatro pasos, por lo que casi siempre es posible conducir con un solo pedal. Por supuesto, el Scenic eléctrico hace su trabajo en silencio.

Manejo

El Scenic comparte la plataforma y la tecnología del chasis con el Renault Megane E-Tech. Sin embargo, el Scenic es más que un Megane alto. De hecho, la plataforma se ha alargado y ensanchado para el Scenic. Esto no sólo proporciona más espacio interior, sino también una distribución diferente del peso. Además, la suspensión se ha modificado para dar al Scenic su propio carácter.

Comparado con el Megane E-Tech, ese carácter es grandioso y señorial. Por el contrario, en comparación con los SUV eléctricos, el Megane es deportivo y dinámico gracias a su menor altura y a su centro de gravedad más bajo. Desde el primer momento, el Scenic transmite una sensación de mayor confianza que un SUV, y con razón. El agarre en carretera es excelente, lo que garantiza una seguridad superior a la media. Junto con la silenciosidad de la cadena cinemática eléctrica, el Scenic realmente se conduce como un coche de una nueva generación.

Conclusión

Muchos fabricantes innovan a pequeños pasos para no alejarse de los clientes. Además, no todo el mundo está preparado para la conducción totalmente eléctrica. Para ellos, Renault ofrece el Austral, el Rafale y el Espace. Para una nueva generación de familias, Renault presenta el nuevo Scenic.

La innovación empieza por el concepto. Renault no opta por ofrecer el coche más grande de su categoría. Como el Scenic sólo está disponible como coche eléctrico, se puede ahorrar mucho espacio. El espacio interior es comparable al de un coche familiar de gama alta. Al mismo tiempo, las reducidas dimensiones exteriores hacen que el Scenic sea más económico y ágil. Por tanto, el Scenic consigue distinguirse positivamente no sólo de los coches familiares convencionales, sino también de otros coches eléctricos.

El equipamiento es moderno y la propulsión eléctrica garantiza buenas prestaciones, un alto grado de confort y bajos costes de funcionamiento. Por tanto, el valor añadido no está sólo en su aspecto o tecnología, sino en su combinación única. Esto convierte al Scenic en una nueva generación de coches familiares para familias de una nueva generación.