Nissan Motor Museum
Saludos desde Yokohama
Nissan abrió su primera oficina en 1933, cuando todavía se llamaba "Jidosha Seizo". Esta oficina estaba en Yokohama porque allí había mucho terreno y porque Yokohama tiene buenas conexiones con el puerto y el interior. Nissan, en poco tiempo, comenzaba a extenderse y compraba nuevos terrenos y edificios.
Hoy en día, el terreno de la fábrica ocupa unos 537.000 m2 y allí trabajan 3.400 personas. Se ha conservado la primera oficina y ésta sirve ahora de museo. Pero... no es cualquier museo de coches. En la fábrica adyacente, Nissan construye solamente motores; entonces este museo muestra la historia de los motores Nissan.

Museo
Cerca a la entrada, se encuentran en una larga fila todos los motores que Nissan mismo construye (ejemplares con cilindrada menor a 1.6 litros mayormente son adquiridos de otros fabricantes). Incluso están los motores eléctricos. El énfasis, sin embargo, está en los motores de combustión interna. Diversos modelos interactivos aclaran el funcionamiento exacto de un motor.
Durante la visita se explica sobre el desarrollo de Nissan y su tecnología. El primer motor Nissan data de 1935 y gracias a su pequeña cilindrada de 722 cc era permitido conducirlo sin licencia. En 1953 se construía motores en licencia del Austin británico. Nissan ha aprendido bastante de Austin. En el transcurso de los años los motores se hacían más fuertes y al mismo tiempo más económicos. Nissan incluso se ha convertido en un verdadero pionero en el campo de la tecnología de la tracción.

Nuevamente, algunas partes interactivas dan más que la teoría. El visitante mismo puede sentir la influencia de un eje de balanceo, cómo mejora el funcionamiento de un motor con piezas más livianas.
El encargado del museo, el señor Maeda, explica con mucha pasión lo especial de cada motor. Muchas veces son meros desarrollos técnicos, pero a veces son pedidos especiales. De esta manera, Nissan construyó una vez un coche para las clases de conducción del emperador japonés. El emperador, entonces, se entusiasmó tanto que encargó un motor especial para su limusina de desfiles. Este motor único está hecho para las velocidades ultra bajas de los desfiles.

Fábrica
Si así lo desea, la visita al museo es completada con una visita a la fábrica. Cruzando la calle está la actual fábrica de motores de Nissan. El motor promedio consiste de unas 400 piezas, pero solamente algunas de ellas son fabricadas aquí. El resto es adquirido en compañías cercanas. Las piezas que son fabricadas en Yokohama son las grandes como el bloque, los pistones y la culata.

En el galpón grande de la fábrica, las piezas son ensambladas para formar el motor completo. Cada paso de este proceso es controlado por robots para minimalizar los desviaciones.

Clean room
Hay un motor que es fabricado en un proceso completamente diferente: quiere decir que en Yokohama también se fabrica el motor para el superdeportivo de Nissan: el GT-R. En esta parte de la fábrica hay reglas muy diferentes.
No son ordenadores y robots, sino personas que ensamblan y afinan este motor a mano. Además, la producción tiene lugar en un "clean room" ("habitación limpia") donde la temperatura y humedad son constantes.

Solamente los mejores de los mejores estudiantes de la escuela de Nissan para técnicos pueden ser nombrados "Takumi", o gran maestro de los constructores. En este momento Nissan tiene cuatro Takumi trabajando en el GT-R.
Usando su tacto y su oído (!), trabajan con márgenes de micrómetros que los más finos aparatos no pueden medir. Unos cuantos micrómetros más o menos de juego en el corazón del motor producen enormes diferencias en un bravucón como el GT-R.

Cada motor es testeado de forma intensiva, mientras que el turbo se vuelve rojo de tanto calor. Para no derrochar energía durante la prueba, el motor impulsa un generador, que produce una parte de la corriente de la fábrica GT-R.
Recién cuando el motor ha pasado las 33 (!) pruebas con éxito, el takumi responsable pone una plaqueta con su nombre en ello. De esta manera siempre sigue responsable de su trabajo. Cuando preguntamos a takumi Kurosawa si alguna vez ha recibido alguna queja sobre su trabajo, responde sonriendo: "no, solamente halagos".

Conclusión
La ciudad japonesa de Yokohama, un suburbio de Tokio, ofrece muchas atracciones para turistas. Para los amantes del automovilismo, la fábrica Nissan con certeza es una. El museo de motores ofrece una visión clara sobre la historia de Nissan y en especial la tecnología. La mayor parte de la información es en japonés e inglés.
Con previo aviso, es también posible visitar la fábrica de motores Nissan al lado. Hay que tomar en cuenta que es meramente una fábrica de motores, y no una espectacular fábrica de coches. El visitante es obligado a guardar distancia porque solamente puede mirar desde una pasadera.
El que compra un Nissan GT-R, y a pedido muy especial, puede ser testigo de la construcción del corazón de su nuevo coche. Mientras que los demás motores son ensamblados con robots y ordenadores, la construcción de un motor GT-R es como la creación de una obra de arte. Usando los sentidos humanos, cada motor es balanceado y afinado hasta ser una verdadera tarjeta de presentación para Yokohama.